Back Orifice es un programa de control remoto de ordenadores que funciona bajo un servidor y un cliente. Si colocamos el servidor a otro ordenador remoto, es posible desde el cliente, gobernar cualquier función del ordenador remoto, entre los que destaca abrir y cerrar programas, controlar el CD, leer y modificar ficheros o borrar parte del disco duro.

Para ello el servidor se autoejecuta y se borra cada vez que el ordenador ajeno se enciende, nuestro cliente escanea el puerto elegido y cuando este esta abierto actúa a través de él, desde un menú repleto de pestañas y opciones de control remoto.

El sistema es bueno para controlar un ordenador u ordenadores dentro de nuestra red LAN, aunque dejar esta puerta abierta para Windows es toda una amenaza.